
¿Las embarazadas pueden practicar Pilates?
Hoy queremos desvelar algunos mitos y realidades con respecto a si las mujeres embarazadas pueden practicar o no Pilates.
El método pilates es un sistema de entrenamiento físico enfocado en el fortalecimiento muscular, flexibilización, equilibrio y coordinación motriz. Es altamente recomendado en todas las fases del embarazo, debido a que la progresión puede variar al igual que el nivel de dificultad de los ejercicios.
Además, el principal enfoque del pilates es el fortalecimiento de la pared abdominal mediante la respiración profunda y la activación consciente de los músculos estabilizadores de nuestro cuerpo, sumado a la activación de los músculos de la espalda y del suelo pélvico.
Las zonas previamente mencionadas, suelen estar asociadas a dolor y molestias durante el embarazo (patologías como pubalgia, lumbago, lumbo ciático son comunes en esta población), por lo que su correcta activación y fortalecimiento es fundamental para el desarrollo de un embarazo sano y sin dolor.
Cabe mencionar que es fundamental una correcta guía para la ejecución de los ejercicios y sus diversas progresiones, contar con profesionales fisioterapeutas o kinesiólogos a la hora practicar pilates marca una diferencia clave para la seguridad y la correcta ejecución de los ejercicios.
La practica regular de pilates durante el embarazo te ayudará en los siguientes aspectos:
– Fortalece tu pared abdominal: La correcta activación de la musculatura abdominal es clave durante el embarazo (no es recomendado hacer abdominales convencionales, sino que sus versiones modificadas, las cuales enfatizan en la activación muscular profunda). Lo anterior se asocia con una mejor higiene postural y una reducción del dolor muscular una vez avanzado el embarazo
– Disminuye el dolor de espalda: Al fortalecer los músculos abdominales, de la espalda y suelo pélvico se aumenta la estabilidad en la zona lumbar – pélvica, reduciendo la incidencia de dolor en esa zona
– Fortalece el suelo pélvico y trabaja el aumento en el rango de amplitud de caderas, tener un suelo pélvico fuerte es fundamental para sostener la progresión del embarazo, además de contribuir a mejorar las condiciones del parto.
– Ayuda a mejorar el equilibrio, por lo que reduce el riesgo de caída y lesión
– Alivia la carga sobre la espalda y la pelvis, al explorar diversas posturas se favorece el estiramiento corporal y se favorece el buen posicionamiento del bebe previo al parto
– Ayuda a relajar y controlar los niveles de ansiedad. La llegada de un bebe cambia totalmente la rutina de vida, por lo que contar con estrategias que ayuden a calmar nuestra mente se vuelve esencial al momento de enfrentar esta nueva etapa de vida.
– Ayuda a controlar la respiración, lo cual es esencial al momento del parto.
Así que ya lo sabes, ahora puedes practicar tranquila Pilates y continuar con tu rutina de autocuidado.